Entendiendo el Aleph

Y para explicar este concepto borgeano, no encontré mejor cosa, que la siguiente frase de García Márquez:

“Ambos descubrieron al mismo tiempo que allí siempre era marzo y siempre era lunes, y entonces comprendieron que José Arcadio Buendía no estaba tan loco como contaba la familia, sino que era el único que había dispuesto de bastante lucidez para vislumbrar la verdad de que también el tiempo sufría tropiezos y accidentes, y podía por tanto astillarse y dejar en una habitación, una fracción eternizada”

En mi cuarto sí corre el tiempo, y en mi cuerpo y mis emociones. Sin embargo hay canciones estancadas, películas, libros… que inevitablemente me transportan instantáneamente a un lugar y un espacio determinados, una estación del año o un sentimiento paralizado. Al menos en el introspectivo proceso de la imaginación.